¿Tú también le tienes miedo al fracaso?

¡¡Bienvenidos a mi blog una vez más amantes del mar!!

En esta nueva entrada, os explicaré un poco por encima el trabajo que nos dijeron que hiciéramos y la aplicación que esta vez tuvimos que utilizar. En esta nueva entrada, resultaba ser una tarea de sonido para la cual nos recomendaron la aplicación de Audacity. Como en todas las entradas, un poco abajo os dejaré una pequeña prueba de como quedó mi trabajo. En esta tarea de trabajo, mi compañero y yo decidimos ponernos un poco filosóficos sobre el miedo al fracaso. Para conseguir los resultados esperados, sin duda fue un tanto complicado ya que para empezar, tuvimos que preparar un poco el texto que teníamos pensado utilizar y después ponernos a grabar. Eso fueron las tareas más fáciles de todo porque no sabíamos que después se nos venía lo peor encima. Una vez que comenzamos a grabar tuvimos varios problemas ya que a veces la grabadora no nos reconocía la grabación y para ello, tuvimos que ajustar varias veces el micrófono. Una vez que ya empezamos a grabar, pensábamos que todo iba bien pero mientras leíamos el texto, nos equivocábamos en varias partes así que tuvimos que empezar a borrar pequeñas partes y volverlas a grabar. Cuando el audio ya estaba hecho, comenzamos con la edición, tuvimos varios problemas con la música ya que queríamos una música así como más o menos triste para que combinara bastante bien con el tema que íbamos a hablar y estuvimos pensando bastante tiempo hasta que sin duda, se nos ocurrió la brillante idea de utilizar una canción de piano y fue la mejor opción que pudimos hacer, la descargamos y la pusimos en lo que ya teníamos grabado pero... resultaba que la música se escuchaba muchísimo más que nuestras voces así que, comenzamos a jugar un poco con el programa, decidimos seleccionar las partes dónde hablábamos y amplificarlas un poco y aunque aún así se siguiera escuchando un poco más la música, decidimos bajarle un poco. Y como podéis comprobar, un poco antes de que acabe el audio, pude conseguir que la música fuera bajándole un poco el tono hasta acabarse por fin la música.
Pero si os fijais un poco, lo último que grabamos que fueron nuestros nombres, fue todo un poco improvisado ya que se nos olvidó por completo que teníamos que decir nuestros nombres e hicimos lo que pudimos para intentar introducirlo que aunque no quedará muy bien, no estoy tan disgustada por el resultado final y por el mensaje que intentamos transmitir y por la elección de nuestra canción de fondo.

¡¡Espero que os guste mucho el resultado del audio y nos vemos en otra nueva entrada!!